Cuida tu salud y el medio ambiente con nuestra cosmética natural

La evolución de la cosmética natural

Cuida tu salud y el medio ambiente con nuestra cosmética natural

El mundo de la cosmética natural ha existido desde siempre. Ya en la prehistoria se acicalaban para asistir a sus rituales, al modo en que todavía lo hacen algunas tribus, usando ingredientes como grasa animal, pigmentos de colores o arcillas.

Pasando por las coquetas egipcias, la industria propiamente dicha llegó en la Grecia antigua de la mano de Alejandro Magno: las mujeres se maquillaban espolvoreándose el cutis con oro blanco y rojo; los párpados, cejas y pestañas… ¿Lo sabías?

Claro que los cánones de belleza han ido cambiando con el transcurso de los siglos, y lo mismo ha sucedido con los materiales utilizados y con los procesos productivos. En especial, la evolución de la maquinaria ha ido transformando el escenario hasta nuestros días.

 

Sabemos que, en pleno siglo XXI, la industria cosmética convencional puede ser de las más contaminantes, porque en la producción se busca la eficiencia y no la sostenibilidad. Se utilizan una gran cantidad de ingredientes químicos artificiales y derivados del petróleo.

 

Además, pueden contener microplásticos de menos de 1 milímetro de grosor que, por su tamaño, no son filtrados por las plantas de tratamiento de aguas residuales. Por eso pueden terminar dañando nuestra salud al formar parte de las cremas exfoliantes, dentífricos y jabones de uso cotidiano… y también el ecosistema que nos rodea si consumimos cosmética convencional, claro. De ahí la importancia de que exista una vuelta al origen, al respeto por la naturaleza y por el propio cuerpo, gracias a la cosmética natural.

 

Para asegurarte de que tus cosméticos no contengan las peligrosas microesferas de plástico, comprueba el INCI o indicador internacional de nomenclatura que aparecerá en el producto en cuestión, y si te encuentras la palabra «polyethylene» o «polietileno», ¡mejor descartarlo!

 

Porque además, estos plásticos se cuelan hacia los océanos, mares y ríos, y los acaban polucionando masivamente. Y si esto fuera poco, hay que pensar que la fauna marina acaba ingiriéndolos… y nosotros a los peces. ¡Así que los plásticos acaban tanto en nuestra piel como en nuestro plato! La cadena alimenticia se llena de sustancias contaminantes. Y todo debido a un proceso productivo que no es respetuoso con el entorno.

 

Efectivamente, el medio ambiente no se reduce solo a los espacios marinos y terrestres, sino que también se trata de preservar las especies animales con las que convivimos.

 

En el proceso de testing o prueba de los diferentes productos cosméticos convencionales, hay empresas que someten a los animales a la experimentación. Aunque esto se ha prohibido en algunos países, conviene estar alerta y elegir marcas con el compromiso «Cruelty Free» o «Libre de Crueldad Animal» que garantiza que ningún animal ha resultado perjudicado para que tengamos en las manos la crema, aceite o tónico en cuestión. Nosotros avalamos esta justicia con los animales en cada producto.

 

Y nos preocupamos, precisamente, de respetarlos, porque hay maneras de simular las reacciones de la piel humana a las sustancias químicas naturales y sintéticas sin tener que agredir a ninguna otra especie.

 

Ah, y por supuesto, cero nanopartículas, como podrás comprobar si echas un vistazo a los INCI de nuestros productos. Por si no lo sabías, la Unión Europea ha dispuesto legislativamente que se informe de si hay nanopartículas en el cosmético indicando (nano) en los ingredientes.

 

Las nanopartículas han sido ideadas por la industria cosmética para rebajar el tamaño regular de la micropartícula hasta un tamaño de 0,000001 milímetros. El objetivo, por ejemplo para las cremas solares, es que no dejen una capa espesa en la piel y que puedan actuar a modo de «mini espejos» que reflejen la radiación solar, pero hay dudas respecto a su inocuidad, por si son capaces de traspasar al torrente sanguíneo. Así que conviene ser cautos, de momento.

 

Como ves, la calidad de los ingredientes que utilizamos es nuestro sello de garantía. Para que cuando te cuides ahora lo hagas como siempre, con la misma seguridad que nuestros ancestros, y con la certeza de no estar dañando el mundo, y el cuerpo, que habitamos.

suscríbete a almasecret


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *