Cómo incluir el aceite desmaquillante Camellia Bloom en tu rutina
¡Sácale el máximo partido!
Vamos a hacerte una pregunta, y queremos que seas totalmente sincera con nosotras, estás en confianza. ¿Qué importancia le das a tu limpieza facial? Si eres una Beauty lover de manual te costará entender esto, pero es que hay quienes realizan cada noche una limpieza superficial, y no prestan toda la atención que deberían.
Pero la realidad es que una buena limpieza facial es posiblemente el paso más importante en nuestra rutina de cuidado de la piel, porque sienta las bases para todo lo que aplicaremos después como tratamiento. Prepara la piel para absorber mejor los cosméticos que apliquemos, al tiempo que mantiene la piel más sana y bonita. Si utilizas maquillaje waterproof o protector solar, la doble limpieza es imprescindible para ti. Y toda doble limpieza en condiciones comienza por un buen aceite desmaquillante.
Cómo incluir el aceite desmaquillante Camellia Bloom en tu rutina
Usar aceite desmaquillante depende de tus preferencias personales, pero es ideal:
- Si te gustan los productos de maquillaje que duran todo el día.
- Si usas protector solar cada día.
- Si tienes problemas cutáneos.
- Si necesitas un producto más suave para tu rutina de limpieza.
Pero lo que no está sujeto a debate es que el aceite limpiador puede mejorar considerablemente tu piel, especialmente si va seguido de un segundo limpiador. Y si no sabes cómo utilizarlo, toma papel y boli, que te ayudamos.
Es imprescindible cada noche, ya que durante todo el día vamos acumulando suciedad, maquillaje, restos de otros productos de la mañana como el protector solar, etc. Aunque también es opcional por las mañanas, puesto que elimina el sebo acumulado durante la noche, la humedad o las células muertas.
Dosifica 1 pump de Camellia Bloom y aplica sobre el rostro seco masajeando suavemente rostro y cuello, con movimientos circulares.
Déjate para el final la limpieza de los ojos. Si es necesario, puedes usar 1 pump extra para limpiarlos. Con los ojos cerrados, frota suavemente con las yemas de los dedos dejando el producto actuar durante unos segundos. Humedece la piel con un poco de agua y masajea para transformar el aceite en una leche limpiadora cremosa y muy fácil de aclarar.
Seca la piel con una toalla y a toquecitos (nunca restregando).
Aplica el 2º paso de la limpieza: el gel limpiador de Caléndula (pieles secas o sensibles) o el gel limpiador de Pepino (pieles normales, mixtas o grasas).
¿Cómo combinarlo?
- Piel seca: Por las mañanas utiliza el agua micelar Pink Mango para eliminar la suciedad acumulada por la noche. Y en la rutina nocturna, realiza una doble limpieza con el aceite Camellia Bloom y el gel limpiador de caléndula.
- Piel atópica o muy sensible: Aplica el agua micelar por las mañanas y por las noches Camellia Bloom y el gel limpiador de caléndula. Limpia de forma muy suave, con agua tibia, para evitar irritaciones. Y seca la piel a toquecitos, sin frotar.
- Piel normal, mixta o grasa: Realiza una doble limpieza tanto por la mañana (agua micelar y gel limpiador de pepino) como por la noche (Camellia Bloom y mismo gel limpiador).
¿Y para los ojos?
Si tienes los ojos sensibles, puedes desmaquillar perfectamente los ojos con Camellia Bloom, así como el desmaquillante de ojos bifásico y el agua micelar.
Y si te maquillas los ojos intensamente, te recomendamos utilizar Camellia Bloom para derretir todo el maquillaje, y finaliza con el desmaquillante de ojos bifásico para eliminar cualquier resto.
Ahora que sabes todo sobre cómo utilizar Camellia Bloom, ¡es hora de ponerlo a prueba!